By Neal Taparia - 8/12/2024
Es sabido que existen muchas versiones del Solitario y algunas son más desafiantes que otras. Incluso, al abrir una página o una app para jugar Solitario gratis, es muy probable que te encuentres con diferentes opciones de dificultad dentro de una misma versión de juego. Pero, ¿cuál es la más difícil de todas?
Dentro de las versiones más clásicas y jugadas del Solitario, la más difícil de todas es el Solitario Spider de cuatro palos. Se trata de un modo de juego que requiere altas dosis de paciencia, observación y práctica. Aquí lo analizaremos en detalle.
Si alguien preguntara ¿cuál es la versión clásica del Solitario?, probablemente la primera respuesta que se nos viene a la mente es el Solitario Klondike. Esta versión se transformó en sinónimo del juego, en gran medida gracias a su inclusión en el sistema operativo Windows a principios de los años ‘90. El software tuvo mucho éxito entre los usuarios durante toda la década, pero llegó un punto en que Microsoft decidió avanzar un poco más y para la versión de Windows ME, lanzada en 2000, incluyó una modalidad más desafiante: el Solitario Spider.
La complejidad de esta versión se basa en que se juega con dos barajas de naipes, en lugar de una. Esto quiere decir que hay 104 cartas en juego, un número bastante más grande que el resto de los Solitarios.
Asimismo, cuenta con diferentes niveles de dificultad: la versión más fácil es la de un palo, la dificultad media es la de dos palos y la más complicada de todas es la de cuatro palos. Pero independientemente del nivel, el objetivo del juego Solitario Spider es el mismo: ordenar todas las cartas de cada palo en orden descendiente, desde el Rey hasta el As.
Las reglas del Solitario Spider son iguales para todas los niveles de dificultad. Solo puedes mover las cartas entre las columnas del tablero siguiendo un orden descendente, formando escaleras. Idealmente, debes crear escaleras del mismo palo hasta lograr la pila completa y así quitarla del tablero.
Cuando juegas con un solo palo, resulta más sencillo, pero cuando juegas con dos o cuatro palos se añaden grados de complejidad, porque también puedes crear escaleras alternando palos. Por ejemplo, puedes colocar un seis de corazones sobre un siete de diamantes y luego, debajo del seis, situar una escalera cinco, cuatro y tres de trébol.
No obstante, debes tener en cuenta que después sólo puedes mover las escaleras de cartas si estas mantienen la secuencia del mismo palo. De lo contrario, solo podrás mover la última carta, o toda su secuencia si es del mismo palo.
Siguiendo el ejemplo anterior, el único movimiento que podrías realizar es el de la escalera de cinco, cuatro y tres de trébol. El siete de diamantes y el seis de corazones estarían bloqueados.
Esto implica que si hay más palos en juego, el número de combinaciones y potenciales movimientos es mayor, pero también son mayores las trabas para mover las cartas o las escaleras. Crear las secuencias del mismo palo es una tarea más ardua, ya que constantemente te encontrarás con bloqueos.
En este sentido, es más probable que cometas errores al tratar de crear las secuencias o, lo más complicado de todo, que al repartir las cartas de los mazos de reserva te encuentres con escaleras totalmente desordenadas, tanto en valor como en palo. Por eso, cada movimiento que realices tiene que ser premeditado y a conciencia, ya que si tomas una mala decisión puedes bloquear cartas o secuencias importantes, generando situaciones difíciles de solucionar.
Las partidas del Spider suelen ser mucho más largas que las de otras versiones del Solitario o las de los niveles de dificultad más bajos. No cabe duda de que se trata de un juego que desafiará tu concentración y paciencia.